Haruki Murakami es a día de hoy uno de los autores japoneses (por no decir el que más) con mayor repercusión fuera de su país. Cada nueva publicación suya se convierte en un auténtico acontecimiento editorial, mientras que miles de lectores devotos por todo el mundo se preguntan de manera impaciente qué nuevos e inquietantes desvaríos nos deparará su próxima novela. O al menos, ese es mi caso. La más reciente obra de la que tenemos constancia es también una de las más ambiciosas, imaginativas y que mejores críticas ha cosechado entre el público y la prensa especializada, que no ha dudado en calificarla como una obra maestra, una novela madura y brillantemente escrita que está fuertemente inspirada en el clásico de Orwell 1984. ¿Estamos, quizá, ante la consagración definitiva de Murakami? ¿O no es más que otra rayada monumental?
Título: 1Q84. Libros 1 y 2
Autor: Haruki Murakami
Año de publicación: 2011 (2012)
Género: Novela, drama
Editorial: Tusquets
Páginas: 944
PVP: 11.95
ISBN: 9788483835999
Sinopsis
En japonés, la letra q y el número 9 son homófonos, los dos se pronuncian kyu, de manera que 1Q84 es, sin serlo, 1984, una fecha de ecos orwellianos. Esa variación en la grafía refleja la sutil alteración del mundo en que habitan los personajes de esta novela, que es, también sin serlo, el Japón de 1984. En ese mundo en apariencia normal y reconocible se mueven Aomame, una mujer independiente, instructora en un gimnasio, y Tengo, un profesor de matemáticas. Ambos rondan los treinta años, ambos llevan vidas solitarias y ambos perciben a su modo leves desajustes en su entorno, que los conducirán de manera inexorable a un destino común. Y ambos son más de lo que parecen: la bella Aomame es una asesina; el anodino Tengo, un aspirante a novelista al que su editor ha encargado un trabajo relacionado con La crisálida del aire, una enigmática obra dictada por una esquiva adolescente.
Opinión
Me cuesta hablar de 1Q84 sin dejarme llevar por el auténtico torrente de sentimientos que me ha producido la lectura de este libro, pero trataré de ser lo más objetivo posible con el único fin de despertar en vosotros el más irracional impulso de salir corriendo a por la última novela de Murakami. En ella, nos encontraremos con dos protagonistas sin ningún tipo de conexión aparente, con personalidades radicalmente diferentes, aunque igual de atractivas, complejas y profundas. Tengo y Aomame son las dos caras de una misma moneda que no deja de dar vueltas ante la atenta mirada del lector, un par de engranajes en torno a los cuales se desarrolla la gigantesca estructura narrativa que Murakami ha decidido dividir en tres tomos. El primero de ellos comienza con una chica llamada Aomame, sentada en la parte trasera de un taxi atrapado en medio de un atasco, mientras que en algún otro lugar, el joven Tengo mantiene una prolongada conversación con su editor, quien le propone una iniciativa rompedora, suculenta e ilegal.
Entre capítulo y capítulo iremos entrando con cada vez más detalle en la vida de ambos personajes, devorando las páginas a una velocidad astronómica, disfrutando como siempre de la bellísima prosa tan característica de Murakami y desgranando con intensa lentitud los interminables recovecos de una historia que nadie sabe a dónde va a llegar. Lo que sí sabemos es que Tengo, al que se le ha encargado la corrección de una obra escrita por una chica disléxica de 17 años, empieza a ser absorbido por su trabajo hasta el punto de no poder distinguir la fantasía salida del libro de la realidad cotidiana, tema que es una de las principales máximas en los libros de Murakami. Por otro lado, Aomame, uno de los seres más fascinantes que he tenido la oportunidad de conocer en toda mi vida y que comparte ciertas similitudes con la protagonista de la saga Millenium de Larsson, resulta ser una asesina a sueldo con tendencias lésbicas que ha desarrollado un método infalible para matar sin dejar rastro, método que solo emplea para vengarse de hombres que no aman a sus mujeres, sino que las maltratan.
"Me guste o no, ahora me encuentro en "1Q84". El año 1984 que yo conocía ya no existe. Esto es 1Q84. El aire ha cambiado, el paisaje ha cambiado. Me tengo que adaptar rápidamente a la forma de ser de este mundo con signo de interrogación. Igual que un animal liberado en un nuevo bosque. Para protegerme y sobrevivir, tengo que comprender sin dilación las reglas del lugar y amoldarme a ellas."
Una de las cosas que más me gustan de este escritor es que tanto los personajes como el desarrollo de sus novelas son totalmente impredecibles, atípicos y en ocasiones, sin mucho sentido. Algo que he aprendido de Murakami es que sus historias no están hechas para ser comprendidas, sino para ser degustadas, y ese es un arte que con el paso del tiempo ha ido perfeccionando hasta alcanzar cotas de maestría casi inimaginables. Conforme avanza la novela, la desconexión entre ambas líneas argumentales deja paso a una serie de puentes narrativos que se van tendiendo entre las historias de Tengo y Aomame, y que nos permiten descubrir de manera deliciosa su pasado en común. Sin embargo, la parte más sentimental de 1Q84, el más que deseado reencuentro entre el profesor de matemáticas y la bella asesina, se ve continuamente interrumpido por una serie de acontecimientos relacionados con el verdadero significado de la novela.
1Q84 es un evidente homenaje a la obra más carismática del escritor británico George Orwell, una joya literaria llamada 1984 que desde el momento en que la leí, no dejo de ver similitudes entre ella y casi cualquier otra novela que me pongan delante. La sutil variación entre el nombre de las dos obras viene a representar la gran influencia que ha tenido el libro de Orwell en la construcción de 1Q84, en el que se hace mención explícita de dicho título y que toma prestados ciertos conceptos como el Gran Hermano y que trata temas como el engaño informativo, la manipulación de los recuerdos, la represión social, la supresión de las libertades y el control total del individuo. Sin embargo, no podemos decir que la novela de Murakami sea una simple copia de otra escrita hace 60 años, sino que tiene la suficiente personalidad y aporta novedades tan originales como para ser considerado un libro que destaca con brillo propio.
"Cuando en una novela se incluye algo que ningún lector ha visto en su vida, es necesario describirlo con todo detalle y precisión. Lo que se puede obviar, o lo que se tiene que obviar, es la descripción de cosas que el lector está harto de ver."
1Q84 es indudablemente un libro voluminoso, el más largo del escritor y sin ninguna duda, el que más me ha enganchado de todos los que he leído. No solo por ese toque fantástico que tienen sus novelas, plagadas de acontecimientos excéntricos, fortuitos e incomprensibles que tienen como objetivo remover al lector, despertar su pensamiento y provocar que elabore sus propias y descabelladas teorías (hipótesis que en la mayoría de los casos se quedan sin respuesta), sino porque en esta ocasión, los protagonistas de esta historia me han tocado con su luz más que nunca, con todas y cada una de sus particularidades, sus virtudes, sus defectos, su soledad, sus vacíos existenciales y una trágica historia de amor inalcanzable. Y encima el final es como para tirarse de los pelos. He oído de mil bocas diferentes que la tercera y última parte, aquella donde deberían resolverse todos los conflictos no resueltos en los dos primeros libros, es una auténtica decepción que nunca debería haber visto la luz, aunque eso no me ha quitado las ganas de saber cómo narices va a terminar este enorme hito en la carrera del escritor japonés. Puedo afirmar sin temor a equivocarme que 1Q84 supone un antes y un después en mi manera de entender la obra de Haruki Murakami, un libro novedoso, estrafalario e irrepetible. Un libro tras el cual, nunca jamás volveré a mirar la Luna de la misma forma.
Puntuación
1Q84. Libros 1 y 2
Por el simple hecho de ser de este gran autor la leeré, además de que la trama me atrapó :D.
ResponderEliminarSaludos.
Seguro que te gusta. Un saludo! :)
EliminarA mí también me pareció de lo mejor de este autor. No se me había ocurrido lo de la comparación con el personaje de Larsson, pero desde ese punto de vista tienes razón. Es cierto que el libro 3 no es tan bueno como éste, pero decir que no debería haber visto la luz me parece demasiado radical.
ResponderEliminarSí, no me puedo creer que un libro de Murakami sea malo xD Aunque seguro que no llega al nivel de este. Besos!
EliminarBueno, parece que alguien se ha quitado una espinita por fin con es te hombre ¿no?
ResponderEliminarTiene Muy buena pinta y si además comentas que la prota se parece a Lisbeth y además es asesina...xD MOLA *-* Antes tendré que leerme 1984 para no perderme las similitudes, pero tirando para el verano yaXD
Un besote!
Aomame es un amor xD Si te lees 1984 antes captarás más detalles, pero que tampoco es necesario...
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarNunca había oído hablar de ese libro, gracias por la reseña.
Me parece muy interesante tu blog, te voy a seguir ¿si?
¡Un saludo!
=)
Gracias! Un beso ;)
EliminarEntender a los japoneses es dificil.. (yo estoy leyendo Mil grullas de Kawabata) pero a mi me encantaprobar todo tipo de narrativas (hasta las más raras)
ResponderEliminarMe lo apunto segurisimo
Solo he leído un libro de Murakami, Kafka en la orilla, y aluciné completamente. La novela me encantó, y tengo muchas ganas de leer algo más del japonés. Me gustaría seguir con El fin del mundo (...), o este, que también se ve muy interesante.
ResponderEliminarTengo que probar algo de este autor, aunque esto que dices de la tercera parte me tira un poco para atrás. Esperaré a ver alguna otra reseña de esta serie, pero vamos, que Murakami tiene que formar parte de mi estantería :)
ResponderEliminarUn abrazo!