► Título: Lo que queda de mí
► Autor: Kat Zhang
► Saga: Hybrid Chronicles #1
► Año: 2013
► Editorial: Maeva
► Páginas: 400
► Precio: 17.90 €
Addie y Eva son dos hermanas que están tardando en asentarse, para gran preocupación de sus padres. Así que cuando Addie da muestras de convertirse en el alma dominante, todos sienten un gran alivio. Sin embargo, Eva nunca llega a desaparecer. Su cuerpo no le obedece, pero ella sigue allí, y solo Addie lo sabe. Y, cuando descubre que existe la posibilidad de volver a caminar, a reír, a cantar… Se aferra a ella con todas sus fuerzas.
Opinión
Entre toda esa vorágine de lanzamientos que sacuden incesantemente las librerías de nuestro país, cada vez cuesta más destacar obras que brillen por su calidad literaria, por disponer de un valor distintivo único o por su capacidad para romper los moldes establecidos, y mucho menos una que consiga conjugar esas tres cosas a la vez. Con la intención de representar ese cambio que tantos lectores llevamos mucho tiempo esperando, llega por fin Lo que queda de mí, una propuesta de corte juvenil bastante sugerente que se sirve de ideas no demasiado originales, pero sí poco explotadas dentro del género en el que se sitúa el debut literario de Kat Zhang. Ambientada en una sociedad futura y aparentemente idílica, donde los niños crecen con dos personalidades encarceladas dentro del mismo cuerpo hasta que una de las dos se sobrepone a la otra, Lo que queda de mí llama la atención principalmente por ser una novela cuando menos interesante y fuera de lo normal, una historia que parte de una buena base pero que quizá no llegue a indagar al grado debido en las diversas cuestiones que saca a relucir. Y eso, lamentablemente, hace una considerable mella en el resultado final.
Addie y yo nacimos en un mismo cuerpo, con los dedos intangibles de nuestras almas entrelazados antes incluso de respirar por primera vez. Nuestros primeros años juntas fueron también los más felices. Luego llegaron las preocupaciones; el rictus de ansiedad de nuestros padres; el ceño fruncido de nuestra maestra en la guardería; la pregunta que todos formulaban en voz baja cuando creían que no oíamos:
¿Por qué no se asientan?
Las protagonistas de esta novela son Addie y Eva, dos hermanas que, tal y como se apuntaba al principio, comparten en todo momento pensamientos, emociones y estímulos con la salvedad de que solo una de ellas puede adquirir control completo del cuerpo en el que habitan. A lo largo de los primeros capítulos de Lo que queda de mí se nos describe de forma pasajera ese proceso conocido como "asentarse", a través del cual todos los ciudadanos son sometidos en su infancia a un arduo adiestramiento que tiene como objetivo suprimir la personalidad recesiva presente en cada pareja. A los que no son capaces de efectuar dicho cambio se les conoce como híbridos, entes marginales repudiados por la sociedad, perseguidos por las fuerzas del orden y encerrados en inquietantes instituciones cuyo verdadero objetivo permanece en el más absoluto secreto. Sin embargo, Addie y Eva han conseguido burlar el férreo control que el gobierno ejerce sobre la población y ahora llevan una vida apacible en la que Eva, lejos de ser eliminada, yace escondida en el interior de Addie a la espera de una solución mejor.
Como toma de contacto he de reconocer que no está nada mal. Los compases iniciales de Lo que queda de mí no solo presentan a un escueto e inusual elenco de personajes, sino que ponen sobre la mesa temas de hondo calado en los que esa vocecita interior que todos llevamos dentro y con la a veces se hace muy duro convivir cobra una nueva e inquietante dimensión. Ahora bien, el principal defecto que le encuentro a la novela de Kat Zhang es que no es capaz de mantener elevado el listón y una trama que podría haber dado enormes cosas de sí queda relegada a un plano secundario donde a lo que se concede auténtica importancia es a la relación (un tanto insulsa) entre Addie y su agazapada gemela Eva. De haber tenido personalidades más definidas, el recurso de intercambiar continuamente la voz narrativa entre Addie y Eva hubiera surtido el efecto deseado y no daría la impresión de que estamos ante dos copias indistinguibles de la misma persona, problema que se extiende al resto de personajes de la novela con la misma peculiaridad de las protagonistas.
Nadie pronunciaba ya mi nombre. Ya no era Addie y Eva, Eva y Addie. Era solo Addie, Addie, Addie.
Solo una niña, no dos.
Por si fuera poco, el argumento en sí es bastante lineal, inflexible y extremadamente lento en su desarrollo. Sin exagerar, hay un período de la novela que se extiende durante más de 200 páginas en la que los personajes permanecen en el mismo sitio, divagando sobre unos temas y otros, observando el mundo que les rodea sin atreverse a tomar partido hasta el precipitado tramo final. Además, del mundo en el que se ambienta la historia apenas nos dejan ver un par de pinceladas dispersas que ni siquiera ayudan a esclarecer los enormes huecos narrativos que plantea Lo que queda de mí. Escrita con cierta gracia, buen uso de los diálogos y un ritmo lo suficientemente comedido como para no caer en el tedio ni abusar alegremente del cliffhanger, la obra de Kat Zhang no posee otros rasgos estilísticos que la hagan destacar especialmente.
Ahora bien, si algo quiero resaltar de manera muy positiva de esta lectura es que, a pesar de haber tenido la oportunidad, la autora no se enreda en embrollos amorosos de tres al cuarto que impliquen triángulos, cuadrados ni ninguna otra figura geométrica. Aunque existente, la componente romántica de la novela brilla por su brevedad y su irrelevancia. Por el contrario, a lo que sí se alude de forma recurrente es al monólogo interior, a la profunda descripción de emociones, a la búsqueda de la propia identidad y al intento de superar ese miedo a ser engullidos por miedos infundados. Si bien su lectura me ha engendrado sensaciones encontradas y considero que ciertos aspectos se podrían mejorar muchísimo en próximas entregas, Lo que queda de mí es una novela idónea para quien busque algo diferente, extraño y estimulante, una obra alejada de los tópicos más frecuentes del género y que desprende un gran potencial. Esperemos que la autora lo sepa aprovechar.
Hola
ResponderEliminarla verdad tengo muchas ganas de leerlo ya
creo que será mi siguiente lectura
un beso
Lo tengo pendiente y la verdad que me llama mucho porque el tema, aunque como tú dices no es original, pero sí poco explotado. Pensaba que iban a hablar más de ese mundo futuro y lo de que ambas no tengan dos voces bien diferenciadas... no sé son cosillas que no me convencen mucho, pero esperaré a leerlo para sacar conclusiones :D
ResponderEliminarUn beso!
El libro me llama mucho, desde el primer momento que supe de él me enamoro por completo.
ResponderEliminarUn beso
"No se enreda en embrollos amorosos de tres al cuarto que impliquen triángulos, cuadrados ni ninguna otra figura geométrica". XDDDDDD HAMOR.
ResponderEliminarLa verdad es que me llama bastante (y no por la portada). Sobre este tema no he leído nada y me parece muy original, aunque eso que comentas sobre que las personalidad de ambas protagonistas son casi calcadas no me hace ni pizca de gracias. ¿Punto a favor? Adoro que no hayan formas geométricas. En literatura juvenil es lo que más me abruma, así que supongo que algún día (cuando me case con un viejo multimillonario y la noche de bodas muera accidentalmente) lo leeré.
¡Besis!:)
Me apetece leerlo, a pesar de que parece ser una lectura lenta y de sus pequeñas pegas creo que me gustará
ResponderEliminarBesos! ^^
Nunca me había parado a leer una reseña de este libro y me ha sorprendido. A pesar de todas las pegas que le pones me llama demasiado el tema de las dos personalidades, así que ya está en mi wishlist. A ver qué tal.
ResponderEliminar¡Saludos!
Hola!
ResponderEliminarMe vas a permitir que me ría. xDDDDD
Bueno, tras haber leído tu reseña quedan confirmados mis más hondos temores sobre el libro. No es que me haya quitado el sueño, más bien me lo ha producido.
He empezado a leerlo más de dos veces y, tras haber perdido la cuenta, he desistido. Definitivamente, tras leer tu reseña, creo que hay un momento para libros como este y para mí aún no ha llegado la hora de leerlo.
Gracias por tu reseña.
Saludos!
Bueno he visto reseñas positivias de la novela :) pero aun no me acaba de llamar
ResponderEliminarMe gusta que no esté tan centrado en el amor y sí más en el desarrollo de los conflictos internos que puede generar tener dos "personas" dentro. De todas formas, no sé, lo compré en un arrebato (y porque estaba muy barato... xD) pero no suelo tener muchas esperanzas con los libros juveniles que saca esta editorial...
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