► Título: El caso de la pistola y el pastel de chocolate
► Autor: Ashley Miller & Zack Stentz
► Año de publicación: 2013
► Género: Novela, misterio, juvenil
► Editorial: Nube de tinta
► Páginas: 240
► PVP: 15.95 €
► ISBN: 9788415594031
A Colin le encantaría pasar inadvertido, que no le gritaran, que no le tocaran constantemente, que no le obligaran a jugar al baloncesto, que dejaran de hacerle tantas preguntas. Para él no hay nada mejor que observar, sentado en un solitario banco, mientras apunta en su raída libreta roja todo cuanto ve.
El día que se produjo el disparo en la cafetería, en lugar de huir como todos los demás, a Colin le pudo su innata curiosidad de detective y, decidido y emocionado, se acercó al lugar de los hechos. Empezaba, así, el primer caso de su vida...
Opinión
Desde hace apenas unas semanas ya puede encontrarse en librerías españolas la última novedad del sello Nube de tinta, esa fantástica editorial que tiene en su haber títulos tan jugosos, llamativos y recomendables como La lección de August, Bajo la misma estrella o Las tres caras de la luna, libros que a primera vista no tienen absolutamente nada que ver, pero que comparten un mismo espíritu transgresor, refrescante y que a pesar de su carácter marcadamente juvenil, pretende romper las barreras impuestas por la edad. Como viene siendo habitual, El caso de la pistola y el pastel de chocolate es una novela que encaja a la perfección en estos cánones literarios, una lectura difícil de encasillar en un género específico, dirigida a ningún público en concreto y que seguramente habrá supuesto un dolor de cabeza para más de un librero a la hora de situarlo en las estanterías de su tienda. Con un argumento que recuerda enormemente al de El curioso caso del perro a medianoche, este primer trabajo como novelistas del tándem formado por Ashley Edward Miller y Zack Stentz ha resultado ser una novela fascinante y extraña a partes iguales. Una deliciosa y entrañable aventura de instituto que en clave detectivesca analiza con todo lujo de detalle algunos de los aspectos más turbulentos de esa época llamada adolescencia.
El protagonista de El caso de la pistola y el pastel de chocolate es un joven de quince años llamado Colin Fisher que padece síndrome de Asperger, un caso especial de autismo en el que los afectados tienen serias dificultades para aprender a desarrollar habilidades comunicativas o de índole social, motivo por el cual nuestro joven protagonista es objeto de burla o incluso de agresiones físicas. Sin embargo, Colin cuenta además con una inteligencia especialmente privilegiada, una admiración incondicional por la figura de Sherlock Holmes y una incontenible curiosidad científica que lo motiva a interesarse más allá de lo normal por casi cualquier cosa que se cruce en su camino. Aunque es incapaz de identificar sentimientos y expresiones faciales, Colin no es en absoluto ajeno a lo que ocurre a su alrededor, sino que en casa, en el colegio o paseando por la calle, anota escrupulosamente en su pequeña libreta cualquier detalle del comportamiento humano que escape a su comprensión. Esa misma libreta forma parte fundamental de la novela, pues a lo largo de todo el libro aparecen pequeños fragmentos muy bien integrados en el texto que están repletas de anécdotas curiosas, hechos científicos muy interesantes e infinidad de profundas reflexiones que nos permiten adoptar el inusual punto de vista de Colin cuando se trata de hablar sobre su familia, sus compañeros de clase o de temas como el amor, la amistad y la lealtad.
Aunque El caso de la pistola y el pastel de chocolate es un libro realmente estupendo de principio a fin, la historia adquiere especial interés cuando se produce el misterioso accidente que da título a la novela. Tras unas cuantos desencuentros con algunos de sus compañeros y actitudes sospechosas por parte de ciertos alumnos, Colin acude a la cafetería del instituto para celebrar el cumpleaños de su amiga Melissa. De repente, un potente disparo suena en mitad del recinto y todos los presentes excepto Colin salen corriendo de la sala. A partir de ese momento, Colin se empeñará con la ayuda de su libreta y su instinto detectivesco en descubrir a la persona que trajo la pistola al instituto, un trabajo para el que ni siquiera la policía parece estar preparada. Sin poder desvelar nada más de la historia para no estropear las sorpresas que os deparará El caso de la pistola y el pastel de chocolate, solo me queda recomendaros encarecidamente la lectura de esta novela si lo que queréis es pasar un rato divertido y en completo estado de evasión literaria, alejados de tramas enrevesadas hasta el infinito, personajes dominados por una angustia existencial e impredecibles giros argumentales imposibles de asimilar. Aquí encontrarás una novela dulce, absorbente y sin ningún tipo de pretensiones, un relato carismático, enormemente entretenido, narrado con una gran sensibilidad, muy original, estimulante para la imaginación e ideal para intercalar con otras lecturas más espesas. Adéntrate en el maravilloso mundo interior de Colin Fisher, un lugar para los inadaptados, los excéntricos, los marginados, un lugar perfecto para descubrir ese extraño mecanismo que hace girar el pensamiento humano.
De pronto una mujer en un todoterreno y con un teléfono pegado a la oreja rompió el esquema y lo sumió todo en un caos egoísta. A Colin le pareció muy interesante ver que una sola infracción del orden social podía desequilibrar todo un sistema.
El protagonista de El caso de la pistola y el pastel de chocolate es un joven de quince años llamado Colin Fisher que padece síndrome de Asperger, un caso especial de autismo en el que los afectados tienen serias dificultades para aprender a desarrollar habilidades comunicativas o de índole social, motivo por el cual nuestro joven protagonista es objeto de burla o incluso de agresiones físicas. Sin embargo, Colin cuenta además con una inteligencia especialmente privilegiada, una admiración incondicional por la figura de Sherlock Holmes y una incontenible curiosidad científica que lo motiva a interesarse más allá de lo normal por casi cualquier cosa que se cruce en su camino. Aunque es incapaz de identificar sentimientos y expresiones faciales, Colin no es en absoluto ajeno a lo que ocurre a su alrededor, sino que en casa, en el colegio o paseando por la calle, anota escrupulosamente en su pequeña libreta cualquier detalle del comportamiento humano que escape a su comprensión. Esa misma libreta forma parte fundamental de la novela, pues a lo largo de todo el libro aparecen pequeños fragmentos muy bien integrados en el texto que están repletas de anécdotas curiosas, hechos científicos muy interesantes e infinidad de profundas reflexiones que nos permiten adoptar el inusual punto de vista de Colin cuando se trata de hablar sobre su familia, sus compañeros de clase o de temas como el amor, la amistad y la lealtad.
"Por qué" puede ser la pregunta más importante de todas, porque la conducta humana no siempre es lógica. La conducta humana no es un misterio que puede resolverse o comprenderse del todo en términos matemáticos. Simplemente tiene que vivirse.
Aunque El caso de la pistola y el pastel de chocolate es un libro realmente estupendo de principio a fin, la historia adquiere especial interés cuando se produce el misterioso accidente que da título a la novela. Tras unas cuantos desencuentros con algunos de sus compañeros y actitudes sospechosas por parte de ciertos alumnos, Colin acude a la cafetería del instituto para celebrar el cumpleaños de su amiga Melissa. De repente, un potente disparo suena en mitad del recinto y todos los presentes excepto Colin salen corriendo de la sala. A partir de ese momento, Colin se empeñará con la ayuda de su libreta y su instinto detectivesco en descubrir a la persona que trajo la pistola al instituto, un trabajo para el que ni siquiera la policía parece estar preparada. Sin poder desvelar nada más de la historia para no estropear las sorpresas que os deparará El caso de la pistola y el pastel de chocolate, solo me queda recomendaros encarecidamente la lectura de esta novela si lo que queréis es pasar un rato divertido y en completo estado de evasión literaria, alejados de tramas enrevesadas hasta el infinito, personajes dominados por una angustia existencial e impredecibles giros argumentales imposibles de asimilar. Aquí encontrarás una novela dulce, absorbente y sin ningún tipo de pretensiones, un relato carismático, enormemente entretenido, narrado con una gran sensibilidad, muy original, estimulante para la imaginación e ideal para intercalar con otras lecturas más espesas. Adéntrate en el maravilloso mundo interior de Colin Fisher, un lugar para los inadaptados, los excéntricos, los marginados, un lugar perfecto para descubrir ese extraño mecanismo que hace girar el pensamiento humano.
Puntuación
El caso de la pistola y el pastel de chocolate
Los títulos de esta editorial son muy especiales =). Tenía mucha curiosidad por este en concreto, pero es ahora tengo muchas ganas más de leerlo. ¡Un beso y gracias por la reseña!
ResponderEliminarLo tengo ya en casa y creo que lo leeré esta semana porque le tengo unas ganas enormes!
ResponderEliminarComo siempre digo me interesa muchísimo el tema del Asperger y siempre que veo una novela que trata del tema me tiro de cabeza! De verdad que estos personajes son puro amor.
Un beso
Mi opinión en lo referente a Nube de tinta no es muy compartida pero siempre que he leído uno de sus libros (no pocos, ni más ni menos que cuatro) me han parecido que todas comparten el tener una buena idea pero no acabarla de saberla explotar bien. Nos has hablado muy bien de esta pero yo de momento no me atrevo... Me parece que abusan de la sencillez, todos siguen el modelo de "El niño del pijama de rayas" pero explotan en demasía sus características...
ResponderEliminarAun así muchas gracias por tu reseña, la tendré en cuenta.
Besos,
No sabía nada de este libro y si bien no es de mis géneros favoritos, me llama mucho la atención. Me gusta todo lo que cuentas respecto a él, así que tomo nota, gracias.
ResponderEliminarSaludos.
Muy interesante. Otro título que desconocía pero al que le echaré un vistazo pronto.
ResponderEliminar¡Saludos!
me gustaria leerlo aunque estoy deacuerdo con lo que dice trotalibros
ResponderEliminarA mí me encantan los libros que van publicando en Nube de tinta, creo que son muy originales y arriesgados. Todos te dejan con un buen sabor de boca, y estoy deseando hacerme con este!
ResponderEliminarTiene muy buena pinta, me gustan este tipo de personajes ^^
ResponderEliminarBesos!
Me ha gustado mucho la portada y es la primera reseña que leo del libro, estaré atenta a mas opiniones para decidirme o no por el. Gracias
ResponderEliminarPinta curioso, pero me recuerda muchísimo a El curioso incidente del perro a medianoche, es que sino recuerdo mal hasta comparten el gusto por Sherlock Holmes.
ResponderEliminarA pesar de todo, como me suele interesar bastante el tema del Asperger, no me importaría darle una oportunidad.
Un beso!!
Hace bien poco he leído Las normas de la casa de Jodi Picoult, que curiosamente también tiene como protagonista un chico con síndrome de Asperger y devoción por el estudio criminalístico. La verdad es que me encantó, así que tengo cierto recelo por el que nos presentas hoy, porque creo que no voy a poder evitar las comparaciones. Creo que será mejor dejarlo apuntado y leerlo en un futuro lejano:)
ResponderEliminar1beso!