Reseña "Marina"

► Título: Marina
► Autor: Carlos Ruiz Zafón
► Editorial: Booket
► Páginas: 304 páginas
► Precio: 8,95€

En la Barcelona de 1980 Óscar Drai sueña despierto, deslumbrado por los palacetes modernistas cercanos al internado en el que estudia. En una de sus escapadas conoce a Marina, una chica delicada de salud que comparte con Óscar la aventura de adentrarse en un enigma doloroso del pasado de la ciudad. Un misterioso personaje de la posguerra se propuso el mayor desafío imaginable, pero su ambición lo arrastró por sendas siniestras cuyas consecuencias debe pagar alguien todavía hoy.

Mientras Marina no es más que un nombre de lo más común y corriente para la gran mayoría de los mortales, estoy casi completamente segura que sin embargo todos aquellos lectores que hayan tenido el placer de saborear ya esta obra de Carlos Ruiz Zafón estarán de acuerdo conmigo en que Marina no es sólo un nombre más. Y es que si al igual que yo habéis leído Marina con anterioridad, probablemente sabréis perfectamente de lo que os hablo.

Muchos años después de los sucesos que cambiaron su vida para siempre, Óscar Drai decide volver a la ciudad donde sucedió todo para enfrentarse de una vez por todas a sus recuerdos, y relatarnos la historia de Marina, una joven de su misma edad y que lo marcó profundamente por el resto de sus días. Con la prometedora frase de «Marina me dijo una vez que sólo recordamos lo que nunca sucedió» comienza el relato con un Óscar mucho más joven y con las preocupaciones típicas de un adolescente. Y es que nada más empezar hay que reconocer que con las escasas primeras páginas se logra conectar bastante bien con su personalidad: inseguro, infeliz y con ganas de descubrir lo que hay más allá de los muros de su internado, conoceremos así a grandes rasgos y muy deprisa a nuestro joven protagonista. Llevado por la necesidad de buscar aventura un día por pura casualidad y curiosidad de un adolescente, Óscar se adentrará en un extraño, y a primera vista abandonado caserón. Sin embargo y como poco después descubrirá, no era tan abandonado como él creía. Y es que en esa casa de difíciles condiciones vive una joven de arrebatadora belleza y unos profundos ojos de color ceniza que son capaces de robarle el corazón a cualquier joven en su sano juicio.

Me abrumó la soledad que desprendía su persona y, a un tiempo, creí ver en su interior un abismo infinito al que no podía evitar asomarme.

Sin embargo, aunque el peso pesado de la novela recaerá en los sentimientos que logrará despertar en el lector a medida que se desarrollen los acontecimientos, también se caracteriza por una historia bien estructurada, con unos personajes perfectamente definidos, y con sus correspondientes historias que se irán entrelazando hasta atrapar al lector en un continuo misterio tras otro. Así pues Óscar tendrá la oportunidad de ir conociendo poco a poco a esa enigmática chica y de buen corazón, en parte por disfrutar de su compañía, por otra, por estar atrapados en un enredo merecedor de nuestra atención. Y es que sin quererlo ambos personajes se verán envueltos en una historia de traición, venganza, y amor, que se hará ver por medio de un elenco de personajes secundarios que se encuentran casi a la altura de los principales. Con tintes de suspense y hasta ligero terror en algunas ocasiones, la historia de Marina es además la de varios personajes atormentados por un pasado común que les sigue persiguiendo incluso varios años después, y dos adolescentes demasiado curiosos intentando resolver el misterio que los envuelve; y es que el símbolo de una mariposa negra en una tumba, un extraño personaje que aparece cada cierto tiempo para depositar una flor en la misma o un viejo álbum de fotos poco corrientes, nos serán suficiente para caer en la trampa de una novela que se lee además en un suspiro.

Aunque quizás no sea la mejor novela del autor, personalmente no puedo opinar, pues he leído demasiadas pocas de sus obras como para poder opinar tan libremente, Marina por muchos años fue uno de mis libros favoritos, por lo tanto nunca me cansaré de recomendarla a todo lector que quiera acercarse a la obra de Zafón, o que simplemente no la haya leído ya, porque sinceramente, merece la pena. Y aunque esta segunda vez no haya logrado atraparme tanto como lo hizo hace años, y haya echado en falta una mayor profundidad en ciertos aspectos, Marina seguirá siendo por mucho tiempo más uno de mis libros favoritos, y que siempre recordaré con muchísimo cariño. Y es que cada vez que el nombre Marina se cruza por mis pensamiento, no puedo evitar sentir una mezcla de sensaciones agridulces, dulces por haber disfrutado de una buena obra, y tristes por todo lo que transmitió el personaje de Marina, y que aún a día de hoy perdura en nuestra memoria.

Puntuación

Marina