En octubre de aquel año, con una sencilla pluma Sailor terminó la que sería su primera obra, Oíd cantar al viento. Haruki vio cumplido aquel objetivo que se había marcado y llevado por aquel ímpetu, tomó la decisión de presentarse a un concurso para escritores noveles que convocaba una revista literaria.
El tiempo pasó, el otoño dio paso al invierno y éste a la primavera, con ella llegó una llamada de la revista Gunzo, informándole de que su obra había sido seleccionada para la fase final, Haruki, que se había olvidado por completo de aquel concurso quedó sorprendido por la llamada, que solo era un preludio de lo que acontecería más tarde, Oíd cantar al viento se alzaría con el primer premio, publicándose en verano como volumen independiente.
Sin embargo, Haruki no terminaba de estar contento, a su primera obra la sucedió Pinball 1973, que junto a la primera, fueron candidatas al premio Akutagawa, aunque aquello pareció importarle muy poco. Lo que verdaderamente buscaba era darle a sus obras mayor profundidad, dedicar más tiempo del que disponía a lo que ahora se había convertido en su pasión. Por aquel entonces, Haruki, junto con su esposa, regentaba un bar de Jazz que le ocupaba la mayor parte de su tiempo, dejándole pequeños lapsos de tiempo para proseguir sus obras. Con un deseo creciente de dedicarse en cuerpo y alma a la escritura, y tras consultarlo con su mujer, decidió cerrar temporalmente su local, para poder escribir con tranquilidad. Muchos fueron los que vierón en aquello una locura, renunciar a un negocio que le reportada buenos ingresos para dedicarse a algo tan abstracto como el mundo literario, pero él había tomado su decisión y la seguiría hasta el final de sus consecuencias.
Treinta años más tarde, aquella elección, sigue rigiendo su vida. A sus espaldas quedan lo que hoy día son clásicos, novelas que copan las expectativas de millones de lectores, que reciben el halago de los críticos. Desde su actual 1Q89, pasando por su ahora cinematográfico “Tokio blues”, “Kafka en la orilla”, “Crónicas del pájaro que da cuerda al mundo”… Sus obras tienen algo misterioso que encandila al lector, que lo atrapa entre sus líneas y lo mantiene preso hasta la última página. Poético, con un humor fino, personajes inolvidables rodeados de por una realidad que por momentos parece volverse ficticia, un país de las maravillas oscuro y lleno de interrogantes. Cuando hablo de Haruki Murakami, hablo de novelas profundas, en las que hay un hilo conductor en el que se tratan cientos de temas que dan vida a la historia y la sustentan de cientos de detalles, que requieren una segunda lectura para ser comprendidos. Cuando hablo de Haruki Murakami, hablo de leer.
Con Haruki Murakami llegamos a la mitad del especial, faltan otras cinco entradas, otros cinco autores, otras cinco vidas y sus obras. Espero que os haya gustado el especial de Murakami, la introducción corre de la pluma de Shade (no me cansaré de darle las gracias por su esfuerzo y tiempo empleado en mis tonterías) estupenda ¿no os parece? Creo que no queda nada más que añadir salvo que deseo probar la pluma del autor, que espero vuestras opiniones sobre Murakami y simplemente gracias por estar aquí. Y para finalizar (del todo) el trailer de la adaptación de "Tokio Blues" a la gran pantalla.
Hoy mismo he terminado Kafka en la orilla, cada día me sorprende más este autor, me encanta
ResponderEliminarYo voy a comenzar la obra del autor con "Tokio Blues" espero que me guste.
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